Qué lindo es mirar para atrás, como asomándose por una ventana y recordarlos con esas caritas asustadas, con sus delantales y cotonas, con sus mochilas nuevas y los viernes con un vasito listo para compartir la colación.
Trabajamos
mucho, como hormiguitas laboriosas, sin descuidar detalles, compartiendo,
ayudando, cuidando.
Compartimos en
la Biblioteca, frente a los computadores, disfrutamos de las mañanas de sol y
vimos llover juntos desde las ventanas de la salita que nos cobijó durante este
año.
Intentamos hacer de ustedes buenas personas, quisimos educarlos en
autonomía y responsabilidad…. en libertad.
Hoy soltamos sus manos, otra sala los espera, otros Educadores los acompañarán y guiarán, engrandeciéndolos cada día un poco más. Los espera un largo camino por recorrer, y estamos confiadas que los superarán con éxto.
Sinceramente, espero que las palabras hayan quedado en sus mentes, que las manos y el actuar hayan sido guías, para que así algún día, no muy lejano podamos saber que son jóvenes felices y realizados.
Queridos niños y niñas… hoy los dejamos con la satisfacción de haberles entregado todo lo que estuvo a nuestro alcance, el resto lo aprendimos en el camino y lo más importante, lo aprendimos juntos…
Queridas
familias a partir de hoy ya forman parte de nuestros recuerdos y principalmente
de nuestros afectos…
Tía Anita y yo les decimos simplemente
¡GRACIAS!
Kishy
Muñoz Concha
Educadora de Párvulos